martes, 5 de enero de 2010

Mi amigo intergaláctico


Hace más de 15,000 años desde un rinconcito entre Neptuno y Plutón llegó un Crucero espacial, y en el vino mi amigo. Vino con su familia de turismo conociendo los demás planetas del Sistema Solar. Si tenía 20 ojos, 4 brazos o en vez tentáculos no importa, puesto que a través de los milenios ha podido transformarse igualito a uno de nosotros. Desembarcó, y se quedó tan extasiado viendo los picos, montañas, llanuras, mares, ríos, flores y desiertos, que despistadamente se olvidó volver a la nave y para cuando lo hizo ya era tarde, hace rato había partido habiendo hecho incluso el salto hiperespacial. Así que sin más, decidió quedarse en este planeta y habitar en el.

El año pasado vino a trabajar aquí conmigo, buscando nuevas experiencias, como si tantos milenios no bastaran. El tontamente creyó que yo no era lo suficientemente listo para darme cuenta que su conducta no era normal, o lo que nosotros creemos que no es normal. Es un tipo muy especial mi amigo, tiene el poder de la pasividad, puesto que el mundo se puede estar acabando alrededor de él y parecería que no le inmutara, su mente está conectada a través de la telequinesis a su planeta, donde miles de su especie lo deben de extrañar.

Es un tipo muy especial mi amigo, tiene el poder de la fortaleza extrema, no importa cuántos magullones, moretones y golpes se dé jugando su vicio favorito (el Ultímate Frisbee), siempre acude a jugar al otro día, como si estuviera preparándose para las próximas Olimpíadas.

Es un tipo muy especial mi amigo, tiene el poder de la felicidad eterna, no importa si su carro siempre está dañado, si los tapones, si vive muy lejos, si hace un mes y no ha cobrado; el sonríe, sonríe y es feliz, tiene un espíritu de “solte-ría” añejado a través de los siglos que es de imitar.

Es un tipo muy especial mi amigo, tiene el poder de la sensibilidad, es propicio a entender las situaciones y dolores de los demás y con un enérgico “suelta eso” pretende consolar a todo el mundo. Mi amigo, si no fuese de este planeta, si fuera de otro planeta como tú.

Son tantos los poderes que tiene mi amigo, que enumerarlos me tomaría tanto. Pero si tan solo tuviera uno, solo uno de ellos, mi existencia sin duda sería mejor. Cuanto envidio tu capacidad para que la gente no se moleste contigo, eres Coca Cola, dulce de leche, helado de chocolate quien a todos agrada; incluso yo mismo he tratado de molestarme contigo, pero no puedo, sucumbo ante tus poderes.

Sigue así con tú “PLUS”, “exacto” y tú “waaaaaa”, que nos divierte tanto y nunca cambies por favor, nunca, nunca, nunca caigas victima de este aparataje de vida que los medios y la sociedad nos quieren forzar a vivir. Sigue libre amigo, sigue siendo como eres, pero si algún día, fruto del cansancio y de la lucha, sientes que tienes la batalla perdida, avísame, que yo te ayudaré a construir una nave que te lleve bien lejos, de vuelta a tu rincón interplanetario donde seguro contarás a tu especie todas tus aventuras en este pequeño planeta, acuérdate de contarles de este humilde servidor y no olvides tu platillo de Ultimate, compañero eterno en todos tus viajes.

Dedicado a mi amigo Luís…. Mi amigo intergaláctico!!!

2 comentarios:

Soranyi dijo...

Muy chulo y tierno. Se nota k le admiras. Me recordó al que escribí acerca de ti hace mucho tiempo y, k ahora no lo escribiría ni loca jejejej (Es mentira).

Sigue asi, vas bien.

Sir Alexis Jesús Colón dijo...

Amiga, este año planeo inmortalizar a todos mis amigos y seres queridos al blog, tu no te quedas atrás, tengo uno para tí que se que te va a encantar.
Luis Arturo es un tipo de otro planeta, de seguro sería un buen rumbeador contigo.