viernes, 15 de agosto de 2008

Mis amigos "809"



Son curiosas las cosas que nos pasan en la vida. Yo de mi parte debo confesar que no soy realmente un tipo Coca-Cola (aquel que le cae bien a todo el mundo), pero debo admitir que Dios me ha premiado con buenos amigos que me han brindado algo muy valioso: Su fidelidad.

Y ya que estamos en confesiones, tengo el deber de contarles compañeros, que una de mis debilidades es que soy un poco olvidadizo y dejado en algunos aspectos, y uno de ellos es registrar los números de las personas en mi celular. Podríamos decir que es algo tonto de mi parte, pero esto tan insignificante me dejó una lección bastante importante el día 13 de agosto de 2008, día de mi cumpleaños.

Ese día me levanté, y como de costumbre (excepto por las felicitaciones de mis familiares) me preparé y me dirigí a mi trabajo. En ese lugar, al igual que en mi casa, recibí las congratulaciones múltiples de todos mis compañeros de labores, los cuales me desearon mucha salud y muchos éxitos (lo de siempre, pero que todos queremos).

No tuvieron que transcurrir muchos minutos para que comenzaran las llamadas a llegar al celular; familiares, compañeros del grupo de oración, vecinos, antiguas amistades, en fin, un sin número de personas que me estuvieron llamando durante todo el transcurso del día para desearme lo mejor en unas cuantas palabras, algunas las cotidianas y otras no tanto, por ejemplo mi abuela que me deseó que encuentre una mujer para casarme pronto :) :) :).

Pero lo interesante de esto compañeros es la vergüenza que pasé con casi todas las llamadas, ya que la mayoría de ellas no estaban registradas en mi celular y no atinaba fácilmente a adivinar con quien hablaba. Y lo peor, todos los que me llamaron son personas con las que me veo mínimo una o dos veces a la semana. Que vergüenza!!

Luego de pasado el circo y el juego de espías para evitar el bochorno que hubiese pasado si mis interlocutores se hubiesen dado cuenta de la situación, me puse a reflexionar, mientras veía en mi celular el abultado listado de llamadas recibidas durante ese día, y llegué a la cruel conclusión de que solo una minoría (menos de un 5%) de los "amigos" que tengo registrados en mi celular, realmente me llamaron, en contraste con la basta mayoría de mis "incoming calls" que aparecieron como simples cadenas de números fríos comenzadas todas por un 809 ó 829. Ya se cuales números borraré cuando se llene la memoria de mi celular y necesite registrar nuevos números .

1 comentario:

Soranyi dijo...

Bueno, qué decirte? entonces soy de las pocas personas que están dentro de tu "exclusiva" lista de contactos en el celular, jejeje tú ta' pasao.

Bueno, en mi defensa te llamé el 12no el 13. Esta obra, imagino, es un punto a mi favor para mi permanencia dentro de la base de datos en tu cell, al momento que decidas borrar a tus "809".

Nuevamente, bienvenido al mubdo blogger.